Qué difícil es valorar de forma objetiva si realmente te conviene aquello que tantas ganas tienes de comprar… Es por este motivo que he intentado plasmar en una imagen mi algoritmo de decisión para ahorrar en las compras y adquirir solo aquello que realmente vale la pena. Sencillo, pero efectivo.
La importancia de comprar con cabeza 🧠
Una de las formas más habituales de malgastar el dinero es en compras innecesarias. Hablo de cosas como ropa, zapatos, accesorios, gadgets, vehículos y otros objetos similares que no necesitamos pero aun así compramos.
Cosas que muchas veces nos dejan de gustar más rápido de lo que habíamos previsto, aunque justo en el momento de la compra nos parece que son de suma importancia para nuestra felicidad y/o calidad de vida.
Te ha pasado: Tener una sensación de placer que te invade al descubrir que quieres o “necesitas” algo nuevo. Es curioso, ¿cómo nos puede dar “felicidad” descubrir una nueva “necesidad”?
Seguramente porque nos da la excusa perfecta para gastar. Y gastar en cosas para nosotros nos da placer.
Algunos dicen que el hecho de comprar está vinculado a nuestros instintos más primitivos. Por lo visto, comprar cosas nos hace ser (o creer ser) más atractivos y tener mayor estatus social, lo que está vinculado con tener más posibilidad de apareamiento y reproducción. Aunque probablemente no es lo que estás pensando cuando te compras un jersey, un móvil o un coche. O quizás sí… 🤔
En cualquier caso, este tipo de compras puede suponer un gasto importante en tu presupuesto, y esto es lo que no queremos. Por ello he creado un algoritmo de compras que puede ayudarte a tomar mejores decisiones.
No es algo que cumpla siempre al pie de la letra (a quién voy a engañar…), pero sí que intento aplicar este razonamiento cuando valoro comprar algo nuevo. Y cuanto mayor sea el precio, más lo intento aplicar.
Por cierto, antes de verlo, que sepas que en el artículo de cómo ahorrar dinero expliqué la estrategia que sigo para ahorrar el 50% de mi salario y también he escrito sobre cómo ahorrar en luz, por si te interesa.
Vamos allá.
Algoritmo para ahorrar con tus compras
Como ves, no es un algoritmo complejo. He intentado hacer un árbol de decisión sencillo pero que pueda serte útil.
Todo empieza con la pregunta más importante:
¿Lo necesitas realmente?
Me parece muy gracioso la facilidad con la que usamos (me incluyo) la palabra “necesitar” en nuestro día a día. Según el diccionario:
Necesitar: Tener necesidad de una persona o cosa
↓
Necesidad: Carencia o escasez de lo imprescindible para vivir
Por lo tanto, en esta situación no deberíamos usar el término necesidad:
“Tengo que ir de compras porque NECESITO un jersey, tengo 5 en mi armario pero no se cuál ponerme, ya no me gustan”
Tampoco creo que debamos ser completamente inflexibles cuando nos planteemos si necesitamos realmente algo. En mi caso considero que necesito algo cuando:
– cubre necesidades básicas
– me ahorra un tiempo relevante
– mejora mi vida de forma sustancial, o
– reemplaza algo inservible que formaba parte de alguna de las tres categorías anteriores
Realmente no es blanco o negro, la línea al final la pones tú, y es por eso que esta es una pregunta en la que debes pararte y pensar con calma.
En mi opinión el “algoritmo” podría estar formado únicamente por esta simple pregunta. No obstante, no siempre es fácil ser objetivos, por lo que he añadido otras preguntas que pueden ayudarte a tomar la decisión correcta.
En caso de que no sea una necesidad aún queda esperanza, siempre y cuando eso que quieres comprar te aporte felicidad y lo continúes usando en el futuro.
Es fácil caer en la tentación de pensar que cualquier cosa que te gusta y te apetece comprar va a aportarte felicidad. En realidad puede ser así, pero ¿cuánto va a durar? Debes pensar un poco en el medio-largo plazo (como con la inversión 😉).
Una vez decido que el objeto en cuestión es candidato a ser adquirido, lo ideal es esperar al menos un día para reflexionar si vale la pena comprarlo y no tomar la decisión en un calentón (y si puedes esperar más, mejor).
Es sorprendente como en un momento concreto tenemos clarísimo que queremos comprar y en poco tiempo nos damos cuenta de que no vale la pena. Por este motivo es importante esperar un poco antes de decidirte siempre que sea posible.
No obstante, en caso de que sea algo urgente tienes mi bendición para comprarlo (sobre todo si es algo que necesitas). Por cierto, que algo esté rebajado no significa que sea urgente.
Por último, todo aquello que no haya superado las barreras del algoritmo deberá ser sometido a una reflexión profunda. Por muchas ganas que tenga, no me atrevo a decirte directamente “¡Prohibido comprarlo!⚠” porque casuísticas hay miles y este árbol de decisión está lejos de ser perfecto. Sin embargo, sí que te diría que te lo pienses muy pero que muy bien si la compra cae en la casilla roja.
Ejemplos personales
Todos cometemos errores. Y yo no soy una excepción.
Para mostrarte algún ejemplo relacionado con el árbol de decisión, te he traído un par de casos personales. En uno tomé una mala decisión y en otro tuve la gran suerte de que el tiempo me aclaró las ideas:
Me merezco un smartwatch ⌚
Después de un año siendo becario (cobrando MUY poco) y de empezar a trabajar en una empresa (cobrando un poco más) se me ocurrió la gran idea de tener un apple watch.
Creía que me iría fenomenal tanto para el día a día (tener notificaciones en la muñeca) como para controlar el pulso durante mis entrenamientos. En ese momento sabía perfectamente que era un capricho sin mucho fundamento, pero me lo podía permitir y me apetecía.
El viernes decidí que lo quería y el sábado ya lo tenía en mi muñeca.
Todo fue demasiado rápido. Lo encontré por Wallapop, un modelo anterior que estaba a buen precio (al menos hice esto bien).
Tres meses más tarde le estaba haciendo fotos para subirlo de vuelta Wallapop; que las notificaciones te distraigan constantemente y tener que cargarlo cada día no compensaba sus beneficios.
Balance de la decisión: -60€
Bicicleta plegable ¡Qué gran idea!
Hace un tiempo me planteé comprarme una bicicleta plegable como esta para ir a casa los fines de semana (tenía que ir a la estación de tren que estaba un poco lejos). Lo tenía clarísimo. Miré incluso el casco, la mochila y las luces que me iba a comprar. El kit completo.
Como era una compra cara, esperé para ver si encontraba una que me gustara más. Al cabo de unos días, la idea de que “necesitaba” una bicicleta plegable se fue apagando y al final ya ni me parecía razonable. Al final no la compré.
Nada cambió excepto la idea de que sería una buena compra. Me salvé por los pelos (ahora no sabría donde guardarla).
Balance de la decisión: 0€
Podría darte muchos más ejemplos como estos. Solo hace falta echar un ojo a todo lo que mi novia y yo tenemos para vender en Wallapop.
Para terminar, decirte que no hace falta obsesionarse; simplemente ten más presente este tipo de esquema cuanto mayor sea el importe de la compra (aunque tampoco menosprecies el impacto de muchas compras pequeñas).
Y si estás leyendo este artículo significa que estás en camino de mejorar tus finanzas personales y aumentar tu tasa de ahorro. Si te ha gustado seguro que también te gustará este otro donde cuento todo tipo de trucos para ahorrar dinero.
¿Qué te ha parecido mi algoritmo? Soy consciente de que no es perfecto (ni mucho menos), por lo que estaré encantado de que me dejes tus comentarios con posibles mejoras o ejemplos personales
es necesario añadir una nueva vertiente.
Si la persona tiene más de uno, existe la posibilidad de hacer una venta.
;)
Gracias por la aportación Leandro hehe :)
Me ha gustado mucho el algoritmo. Doy fe que lo de esperar 24 horas funciona. Y, si al final no lo compro, pasados unos días pienso “¿para qué querría comprarme eso?”.
Hola Mr. Lyn,
Muchas gracias por tu comentario! Veo que tenemos un nuevo blog que habla sobre la independencia financiera; me encanta que la comunidad en España vaya creciendo!! :)
Mucho ánimo con la web, si necesitas cualquier cosa o tienes alguna pregunta, no dudes en ponerte en contacto conmigo.
Nos leemos,
Guillem
Muy bueno tu resumen, Hormiga.
Y, aunque sí es verdad que todo podría reducirse a “¿lo necesito?”, efectivamente, al tener tanto bienestar hoy día, sí consideramos casi necesarias un montón de cosas que solo queremos por gusto.
Saludos.
Pepe.
Gracias Pepe, a ver cuando nos deleitas con otro de tus fantásticos posts :)
Saludos!
A mi me ha pasado lo mismo con la ps4. Al pasar unos días decidí no comprarla finalmente ya que aun tengo juegos en el emulador del pc que aun no he jugado : )
Tomaste una buena decisión pues, me alegro Alex! :)
Todos los consejos para ahorrar son buenos. ¡Gracias! Lo que a mi me funciona es PAGARME a mí mismo primero. Es decir, en cuanto cobro mi nómina, una parte lo transfiero directamente a mi Fondo de Inversión. Al igual que te adaptas a gastar más cuando te suben el sueldo, también te adaptas cuando te lo bajan, muchos millones de españoles han tenido que hacerlo durante la crisis financiera. Proponerse un objetivo de ahorro duro pero factible es la clave a largo plazo.
Hola RentMan!
Totalmente de acuerdo contigo! Creo que la técnica de pagarte a ti primero a inicio de mes es de las más efectivas para ahorrar. Por otra parte, encontrar un equilibro entre no sacrificar calidad de vida y ahorrar lo máximo posible es lo ideal (aunque no es fácil…)
Saludos! :)